Ropa interior mal conjuntada

Me gusta el juego, pero no me gusta tu manera de jugarlo. Vamos, que me gusta la jugadora, pero no me gusta la jugada. A mí no me importa ganar y a ti te encanta ver perder. Así que claro, prefiero no jugar. Me olvido de las victorias pero es que ya me pesa mucho la mochila de las derrotas.

Ya llegarán otros tiempos y otras jugadas. Ahora mismo he visto tus cartas y no quiero jugar con ellas. Jugar para perder es como mentir sin tener la necesidad de hacerlo. No es que sobrevalore la verdad, es que a base de creérmelo todo, he empezado a no creer en nada.

Por supuesto que me jode, pero es que soy así. Nunca me he creído muy responsable de las cosas buenas que me pasan. Eso sí, las malas sé que han venido por decisiones que he tomado o por decisiones que he elegido no tomar.

Tú eras una buena decisión.

Hay gente que se acostumbra a hacerlo mal y vive a gusto. Ya te digo que me encanta el juego, la jugadora y tus ganas de ganar. Pero estás demasiado segura de que no vas perder y yo tengo demasiadas dudas como para poder ganarte.

2 comentarios

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2 Respuestas a “Ropa interior mal conjuntada

  1. Gina.

    No juegues, pero no te vayas tanto tiempo… Espero que en esa mochila de derrotas te quede espacio para guardar en ella la certeza de lo bien que escribes.

  2. hummm, así que tenemos mal perder…

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